En la orilla
dos mujeres
gritan
efervescencia de años previos
a esa conducta adulta establecida
conseguir bienes y abrazar males
curar males gastando bienes
Gritan
rozando sus cuerpos con inocencia
amando sus manos con libertad
absoluta
soñando su vida
para siempre
en esta playa
en esta ría
para siempre
amigas de noches y estrellas
creando una historia única
argumento genuino de palabras inventadas
Ingenieras de su CALA
y de caminos que derivan
a su hogar caluroso
a su nube de afecto
a su brisa de aliento fresco y sabor a menta
Amantes LIBRES descubriendo inocentes el sexo estival
Treinta grados ahogados en el agua
donde cuerpos-peces
descubren
magnéticas sensaciones
placer sutil
profundo
gotitas que caen de melenas empapadas
sobre extremidades excitadas
Tendidas en la arena
la marea se las traga
y mar adentro
alimentan
la barriga de una ballena